“No merecía perder. Estaba abatido y salió a pelear igual, pero ese combate fue su único nocaut”, recuerda y aún le duele. “Papá, yo voy a pelear y buscar el título de campeona del mundo”, le prometió aún sin saber siquiera qué le decía.
El primero de febrero, en Villa Carlos Paz, buscará convertirse en campeona del mundo en la categoría minimosca. (Infobae)
Fuente: CiberPeriodismo
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